Almohada Visco Soft
Desde: €50.00Almohada de firmeza suave. Recomendable para personas que buscan una almohada suave y ligera.
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Almohada de firmeza suave. Recomendable para personas que buscan una almohada suave y ligera.


Almohada de firmeza media. Recomendable para personas calurosas


Almohada de firmeza alta. Recomendable para personas que quieren sentir la almohada y tener la cabeza ligeramente elevada.


Nuestra almohada para cuna de bebé


Almohada de firmeza medio alta con cara de verano y invierno. Recomendable para personas que quieren sentir la almohada y tener la cabeza ligeramente elevada.


Almohada que se adapta a la temperatura corporal, dando una sensación de confort inigualable.


Esta és nuestra almohada más ecológica, dispone de funda de algodón que da un tacto suave y acogedor.


Almohada especial para personas calurosas con tendencia a sudar durante el sueño. Dispone de una capa de thermogel que atempera el calor y da sensación de frescor.


És nuestra básica, aunque no deja de ser una gran almohada con una calidad-precio excepcional.

Las almohadas son elementos de soporte diseñado para mantener la alineación correcta entre la cabeza, el cuello y la columna durante el descanso. Su función principal es preservar la curvatura cervical fisiológica para evitar tensión muscular, mejorar la calidad del sueño y favorecer la recuperación nocturna. Se considera un dispositivo ergonómico cuya eficacia depende de factores como la densidad, el nivel de firmeza, la capacidad de adaptación cervical, la ventilación interna y la estabilidad lateral. Los materiales (como la viscoelástica o la microfibra) influyen en la distribución de presión, la regulación térmica y la durabilidad, por lo que la elección adecuada debe considerar peso corporal, postura al dormir y sensibilidad térmica del usuario.
Seleccionar Almohadas adecuadas exige evaluar densidad, nivel de firmeza y capacidad de adaptación cervical, ya que estos factores determinan la alineación correcta entre cabeza y columna. Una Almohada que no mantiene la curvatura fisiológica produce tensión muscular y fragmentación del sueño, afectando la recuperación nocturna y el rendimiento cognitivo . En España, los consumidores priorizan Almohadas de memoria viscoelástica por su capacidad de distribución de presión, mientras que el sector hotelero profesional prefiere Almohadas de microfibra por su facilidad de mantenimiento y durabilidad.
Las Almohadas deben seleccionarse también en función del peso corporal, la postura habitual al dormir y el nivel de sensibilidad térmica del usuario; estos parámetros determinan la necesidad de ventilación avanzada o materiales termoactivos para evitar acumulación de calor. Cuando una Almohada integra canales de circulación interna y núcleos de soporte diferenciados, se incrementa la estabilidad lateral, mejorando la calidad del descanso en personas con movimientos nocturnos frecuentes.
Las Almohadas diseñadas correctamente reducen la tensión en la zona cervical y facilitan una respiración más estable, ya que una posición neutra del cuello libera vías aéreas y disminuye la probabilidad de microdespertares durante la noche. En segmentos clínicos, se ha observado que una Almohada ergonómica mejora la variabilidad cardiaca y disminuye el estrés muscular acumulado tras largas jornadas laborales.
Para usuarios con alergias, las Almohadas hipoalergénicas con tratamiento antibacteriano son esenciales para minimizar la exposición a microorganismos y ácaros, especialmente en zonas de España con altos niveles de humedad ambiental. En entornos de uso intensivo, como apartamentos turísticos o complejos residenciales gestionados, una Almohada de alta resiliencia conserva su forma durante más ciclos de uso, reduciendo costes de reposición y mejorando la percepción general del alojamiento.
El reemplazo de Almohadas depende del material y del nivel de uso, aunque el estándar técnico indica que una Almohada pierde entre un 15 % y un 25 % de su soporte estructural cada año de uso intensivo. Cuando la Almohada muestra hundimientos permanentes o zonas compactadas, la redistribución del peso deja de ser uniforme, generando tensiones cervicales y reduciendo la eficiencia térmica.
En el sector doméstico español, el reemplazo general de Almohadas oscila entre cada 18 y 36 meses, mientras que en hoteles y alojamientos es común reemplazarlas anualmente para mantener estándares de calidad y evitar que la pérdida de volumen afecte la experiencia del huésped. Una Almohada debe sustituirse también cuando su funda muestra deterioro irreversible o cuando el núcleo interno presenta cambios de olor asociados a humedad o acumulación de partículas. Para usuarios con alergias o asma, la rotación frecuente de Almohadas es imprescindible para preservar una atmósfera más limpia.
La posesión de Almohadas adecuadas determina la postura de descanso y, en consecuencia, el estado físico tras el sueño. Cuando las Almohadas facilitan la alineación natural de la columna, se reduce la presión en articulaciones y se optimiza la recuperación muscular. Kuqui enfatiza que las Almohadas adecuadas son un componente estructural del descanso, no un accesorio opcional, porque influyen directamente en la calidad del sueño profundo y en la capacidad de concentración durante el día.
En hogares españoles con ritmos laborales exigentes, disponer de Almohadas que se adapten al perfil fisiológico de cada usuario mejora la eficiencia del descanso y disminuye la probabilidad de dolores cervicales recurrentes. Además, las Almohadas correctas funcionan como un sistema complementario a un colchón de calidad, equilibrando la distribución del cuerpo y evitando que el cuello adopte posiciones forzadas durante horas prolongadas.
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